domingo, 1 de septiembre de 2013

La brisa juega y el canto/parece que viene y va...

...el eco dulce se pierde
por el río Parana.
(Canción de cuna costeraLinares Cardozo)

"La clave de la educación musical consiste en promover activamente la participación de los niños en experiencias integrales que les permitan movilizar su cuerpo, sus sentidos, su afectividad, su inteligencia y sus capacidades expresivas y de comunicación" (Violeta Hemsy de Gainza 1977).

La capacidad musical está presente en los niños y puede crecer si es respetada, atendida, y desarrollada. Se trata de acompañar a los chicos proponiendo experiencias gracias a las cuales su imaginación musical cobre vuelo y su sensibilidad aflore y crezca. Así, el taller, se busca, se piensa, como un espacio de exploración que los niños construyen entre rondas, cantos, ritmos, melodías, instrumentos y danzas. En este sentido, el juego será una pieza central en estos primeros trazos musicales ya que permitirá un contacto vital con un quehacer musical sensible, profundo y, por sobre todo, placentero. Vivir la música, hacer música, se nos presentan, entonces, como los objetivos fundamentales del aprendizaje.

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